La serpiente que comía dinosaurios



Reconstrucción de la escena hallada, diseñada por Tyler Keillor, de la Universidad de Chicago

En Gujarat, al oeste de la India, se ha encontrado un extraordinario fósil, en sedimentos con 67 millones de años de antigüedad. Se trata de los restos casi completos de una serpiente en un nido de dinosaurio saurópodo. Estos dinosaurios hacen parte de los mayores animales que han pisado alguna vez la tierra.


La serpiente se encontraba enrollada alrededor de un huevo de dinosaurio, y al lado de una cría recién nacida.

En el mismo sitio geológico se han encontrado otros nidos de dinosaurios junto con restos de serpiente, lo que viene a indicar el modo de alimentación de dichas serpientes. 

Este descubrimiento ha sido realizado por un equipo paleontológico internacional dirigido por Jeff Wilson, de la Universidad de Michigan, y Dhananjay Mohabey, del Servicio Geológico de la India, y la investigación de campo fue financiada por la National Geographic Society. Ha sido publicado en la prestigiosa revista PLoS Biology.
Esta nueva especie de serpiente, bautizada Sanajeh indicus, proporciona información también sobre la temprana diversificación de las serpientes. Hoy en día las serpientes poseen características mandíbulas montadas sobre partes móviles del cráneo lo que les permite ingerir grandes presas. Sin embargo, la Sanajeh indicus sólo presenta parcialmente estas características, aunque podía ingerir la cría de saurópodo (de medio metro de longitud), siendo su propio cuerpo de unos 3,5 metros.

Especulan los paleontólogos si las serpientes habrán seguido como línea evolutiva el aumentar el tamaño de su propio cuerpo para poder ingerir presas de mayores dimensiones, una vez que las tienen que ingerir siempre enteras (las serpientes no poseen mecanismos, como dientes o garras, capaces para desgarrar las presas en partes menores).
 

Los parientes más cercanos de esta serpiente se sitúan en Australia, lo que viene a confirmar una vez más el origen de la India en el antiguo continente sur de Gondwana.

Pueden ver aquí un vídeo de la Universidad de Michigan donde explican el descubrimiento.